Evitemos que colapse nuestro equipo de béisbol
“Para subir al cielo se necesita una escalera grande y otra chiquita”, de lo anterior, no tengo la menor duda, el mismo paso del tiempo lo ha mostrado.
¿Qué pretendo decir con esta expresión? Señores, si todos los factores no son capaces de sumarse, nadie podrá evitar que colapse nuestro equipo de béisbol.
Está en marcha la segunda ronda de la 57 Serie Nacional, ahora los conjuntos se observan más fuertes, con mayores potencialidades.
Retomo el tema de las escaleras. Para salir adelante deben fusionarse los peloteros más experimentados con los noveles, los originarios y los visitantes.
Quiero decir, se necesita una dinámica de grupo que no excluya, y sí, sume. Todos debemos integrarnos con pasión a la tarea, el que no pueda, que lo diga ahora o lo calle para siempre.
En resumen, todo lo positivo vale, a partir de un buen concepto de equipo, “Palo solo, no hace monte”, y si lo hace es de madera endeble, muy frágil.
Estamos a tiempo de salvar el honor pinareño, la segunda ronda prácticamente comienza, nada está perdido.
El llamado es a protagonizar una severa carga al machete. Nuestra novena puede, y una y mil veces lo ha mostrado.
Que se rompa el corojo en Artemisa, para comenzar a revertir una etapa que constituye trago amargo para la familia beisbolera pinareña.
0 comentarios