Sus medallas yacerán en el fondo del océano.

Un día como hoy, 6 de octubre de 1976, el imperialismo y sus lacayos, perpetró el horrendo Crimen de Barbados, donde perdieron la vida las 73 personas que volaban a bordo de una Aero Nave de Cubana de Aviación.

44 años después, gritamos a los cuatro vientos que nuestros hermanos no están ni olvidados, ni muertos, y que viven en la eternidad del heroísmo de su pueblo.

Hoy Cuba llora la pérdida de 57 compatriotas, entre ellos los integrantes del equipo juvenil de esgrima. Por cierto en el grupo y víctima de la tragedia, fue asesinada la pinareña Nancy Uranga Romagoza, y también un insipiente retoño que palpitaba en su vientre.

No habrá paz sobre la tierra, mientras manos ensangrentadas, trunquen el derecho a la vida de personas inocentes. Digamos una vez más, no al terrorismo. Es una formula imperial para socar la fe y la esperanza de los pueblos.