El Tampa Bay Rays viene a La Habana

La Federación Cubana de Béisbol y las Grandes Ligas de Estados Unidos hicieron público que el próximo día 22 una selección de casa y el equipo Tampa Bay Rays se enfrentarán en el estadio Latinoamericano.

Será el segundo partido de este tipo, después que los Orioles de Baltimore actuarán en el mismo parque en 1999.

El cotejo genera grandes expectativas, conocida la rivalidad beisbolera entre Cuba y Estados Unidos, y tal como precisa la nota agrega el significado de producirse en un importante contexto de acercamiento entre ambos países.

Con sede en St. Petersburgo, en el estado de la Florida, la selección norteña juega en la División Este de la Liga Americana, donde también lo hacen Orioles de Baltimore, Medias Rojas de Boston, Yankees de Nueva York y Azulejos de Toronto.

Se unió a la Liga en 1998 y tiene por casa al Tropicana Field, un estadio cubierto con capacidad para 42 mil 735 espectadores inaugurado el 3 de marzo de 1990 y construido a un costo de 130 millones de dólares.

Campeona de su circuito en 1998 y 2000, también atesora un subtítulo y par de terceros lugares.

En 1998 cayó 1-4 partidos por el cetro de la Serie Mundial frente a los Phillies de Philadelfia y en el 2000 cedió en la serie divisional ante los Ranger de Texas, equipo que en definitiva ganó esa temporada ante los Gigantes de San Francisco, de la Liga Nacional.

Aunque aún se desconoce el roster oficial de que dependerá en La Habana es de esperar que no falten los lanzadores Chris Archer, el de más victorias del equipo (12), mejor promedio de carreras limpias permitidas (3.23) y más ponches (252) en la campaña precedente.

Y debe acompañarle Brad Boxberger, líder en salvamento con 41.

Entre los jugadores de posición cuentan con el archiconocido Evan Longoria, quien disparó 21 cuadrangulares, impulsó 73 carreras y pegó 163 indiscutibles para comandar esos departamentos dentro de la armada.

Otro sobresaliente es Logan Forsythe el mejor promedio de bateo (.281) y .359 de OBP.

El manager Kevin Cash ha considerado trascendental enfrentar a una selección de la mayor isla antillana, conocido el prestigio de su pelota y sus aficionados.

Cuba ha confirmado que presentará a un equipo que responda a las expectativas de sus seguidores, lo que permite pensar en el llamado a los mejores exponentes de la actual campaña.