Un gran campeonato, que ganó el mejor
Pinar del Río-A, consolidó un nuevo triunfo en la pelota provincial, primera categoría, ahora tras dominar una enconada porfía frente a Consolación del Sur, en play off que llegó al quinto y último compromiso pactado.
Estos equipos se midieron a Mantua y La Palma, ocupantes del tercero y cuarto lugares, tras concluir la semifinal, que también fue programada al mejor en tres, de cinco partidos, en los circuitos Occidental y Oriental.
Revisando estadísticas de dos décadas, a partir de 1991 y hasta el 2012, los dirigidos por Lázaro Madera, archivan 20 trofeos, incluido este que hace pocas horas copó sus vitrinas.
En el periodo analizado Mantua se agenció un gallardete (1998), de igual manera, San Juan y Martínez (2003) y San Luis (2012). Esos son los títulos que escapan al poderío del elenco capitalino-A, cuajado de estrellas probadas en Series Nacionales.
Consolación del Sur, subcampeón del torneo reciente, relata otra historia que se resume en larga espera que ya alcanza un cuarto de siglo, sin escalar el segmento más encumbrado de los podios.
Los organizadores pueden descansar feliz, fue una buena competencia, organizada como nunca y capaz de aglutinar 12 conjuntos, seis en cada región geográfica, que salieron a darlo todo. Felicitaciones también, para la Empresa de Transporte Escolar, que no falló en la ardua misión de movilizar los planteles.
Fue admirable que Pinar del Río-A (Campeón) y Consolación del Sur, ocupante del puesto dos, efectuaran 47 y 46 juegos en la temporada, respectivamente. Pero además, las restantes 10 selecciones, todas sobrepasaron los 30.
Tabla Final de Posiciones del tercero y hasta el duodécimo, de acuerdo al orden que aparecen.
La Palma- 26 victorias y 10 fracasos, Mantua 23-11, Viñales 17-16, San Luis 16-16, San Juan y Martínez 14-17, Los Palacios 14-20, Guane 14-22, Pinar del Río-B 13-21, Minas de Matahambre 9-26 y Sandino 8-26.
Se impone seguir trabajando con especial consagración a favor del béisbol, en esta región, la más occidental del país. Vamos bien, pero no podemos perder el ritmo.
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